Panorama de La Pedriza y Cuerda Larga en el descenso a Manzanares el real. Foto: Gonzalo. |
Un par de semanas despues de los 90k de Vasaloppet, me encontraba ya bastante recuperado de las 10h de esquiada, por lo que quise participar en los 10k de La carrera del Agua. Sin embargo, ésta es una de aquellas ingratas que obligan a recoger los dorsales en día previo a la carrera. Es decir: Bajar de Cercedilla a Madrid dos veces para una misma carrera. Se me pasó, mea culpa :-(
Así que el Domingo tras el madrugón me dí cuenta que no podía participar en la carrera a la que estaba inscrito...qué hacer? Primero calenté un poco con autoinsultos por no leer más despacio la letra pequeña de la carrera. Despues pasé a una breve sesión de intervalos: Cariñosos recuerdos para la familia de toda la organización de la carrera.
Ya con los músculos de la lengua y la cabeza más sueltos, opté por irme a disfrutar de una de las mejores rutas que ofrece el Guadarrama en primavera/otoño: Los 16k de la Cañada Real de Cerceda a Manzanares el Real. Como me recordó acertadamente @Prisillas en el twitter, entre el asfalto capitalino y el trote por la cañada bajo el sol de primavera, no hay color. Desde @moxigeno, gracias Joséma :-)
Pedro wildrunner y Alberto, rodando de vuelta hacia Cerceda. Foto: Mayayo |
No es la primera vez que hablo aquí de este circuito, ni será la última. Viviendo en la Sierra es quizá nuestro más cercano equivalente a los míticos 16k de la "Tapia" casacampera de los corredores del Madrid Distrito Federal. Ambas comparten sube-bajas variados, sin excesivos desniveles, y una distancia perfecta para bien rodar suave o suelto ("rodaballo" en argot paquetil) ; o bien sacarla empujando a ritmos controlados tipo media maratón. Aquí el circuito completo visto por el Garmin
La ruta arranca desde un cómodo parking junto al colegio y campo de fútbol de Cerceda, en la glorieta de su gasolinera amarilla. Se orienta primero entre dehesas de ganado a buscar el paso por debajo de la M-607 a Colmenar por un tunelillo, y a partir de allí se abren ya los horizontes, a menudo sobrevolados por las grandes rapaces. Al cabo de unos 5k se cruza con el Camino de Santiago de Madrid y ambos giran para buscar al alimón el paso hacia Manzanares el real. Este tramo en lo alto es el más dulce de la ruta, pues ofrece un fabuloso mirador de la Pedriza toda, cobijada por la panorámica de una Cuerda Larga completa desde Maliciosa al Puerto de Morcuera.
Si además, ese día la cresta entera está nevada y el sol brilla sobre La Pedriza, vale la pena parar un momento y saborear las vistas. Una delicia. De allí poco más de 2k de fuerte bajada hasta el borde mismo del Embalse de Santillana, lugar donde completar el bucle e iniciar la vuelta. Ahora tocarán esos mismos 2k convertidos en perfecta rampa para entrenar potencia ;-)
Y así, empujando o no a gusto del corredor hasta encontrarnos de vuelta en Cerceda, con 16 sabrosos kilómetros serranos a la espalda.
Pedriza coronada por el Yelmo, desde la ribera del Embalse de Santillana. Foto Mayayo. |
Y allá el fondo, los 101KM de Ronda esperan.
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Info redactada por Mayayo para Mayayo Oxigeno